El mejor hosting web depende de tus necesidades

Qué hosting web elegir es una de las preguntas que más se hacen las personas que van a sumergirse en el mundo de las tiendas online o la blogosfera. También se la hacen las empresas o profesionales que desean ampliar horizontes en Internet mediante una página corporativa o de negocios. Lo mejor es dejarlo en manos de profesionales que sepan aconsejarnos adecuadamente, según las necesidades y expectativas que tengamos. Pero, si no es así, debemos tener una serie de cuestiones muy en cuenta.

La primera de ellas es que la elección del mejor hosting web para nuestro caso en particular nunca debe tomarse a la ligera. Es tentador aprovecharse de auténticas gangas que ofrecen algunas empresas de hosting, pero puede ser un error que se pague muy caro desde el primer momento.

El alojamiento es fundamental, una mala elección puede hacer que la página no cargue, que se produzcan errores continuamente, que los e-mails lleguen como spam, que no haya un soporte técnico eficiente para solucionar problemas de mantenimiento, etc. Inconvenientes que significarán, seguramente, el fracaso, porque una web que no funciona bien y con agilidad se queda sin visitas.

Tipos de alojamiento web

Una vez que tenemos claro que sólo hay que confiar en empresas serias, las posibilidades de alojamiento son variadas:

• Alojamiento compartido: un servidor acoge varias webs. Se comparte espacio y recursos, de modo que si hay usuarios que abusan de ellos podemos vernos afectados. Un problema, sin embargo, que las empresas de alquiler de hostings van solucionando poco a poco ¿Cómo? Evitando la sobre explotación de las máquinas, de modo que agotar su capacidad es muy difícil. Además, pueden llegar a ofrecer un buen soporte técnico y buenas funcionalidades. Para comenzar a andar en el difícil mundo de Internet puede ser una buena alternativa.
• VPS: Se trata de un servidor físico dividido en alojamientos virtuales completamente independientes entre sí. La base podría parecer la misma que en el caso de los alojamientos compartidos, pero en este caso no se comparte nada con otros usuarios: ni memoria, ni funciones, ni capacidad.
• Servidor dedicado: la máquina física es para un único usuario que puede disponer de ella libremente para alojar todo lo que quiera y para instalar cualquier tipo de función o plugin que considere necesario para el correcto funcionamiento de las páginas a su cargo. Cuando se trata de webs con mucho tráfico o que necesitan grandes bases de datos, esta es la mejor opción.

¿Qué se recomienda? Depende de las necesidades. En los primeros pasos de una aventura virtual tal vez sea mejor empezar por un alojamiento compartido e ir escalando según vayan aumentando las necesidades. Todo depende de ti.