El VPS es una de las formas de alojamiento más demandadas, y no es por casualidad, sino por las prestaciones y el precio que ofrece. Un servidor virtual privado que funcione en un entorno Cloud, ofrece atractivas ventajas para el usuario, más allá de lo que primero se evalúa, que es el coste. Vamos a ver algunas de ellas:
- Flexibilidad: un VPS permite modificar los recursos en tiempo real; transferencia de datos, espacio en el disco o memoria, entre otros aspectos.
- Disponibilidad: ante cualquier problema se puede crear en muy poco tiempo un servidor nuevo idéntico, de modo que el funcionamiento siempre está garantizado.
- Escalabilidad: se puede aumentar la capacidad del sistema sin necesidad de rehacerlo, ya que existe la posibilidad de crear más máquinas virtuales para satisfacer esa nueva necesidad ante un aumento de carga.
La importancia de la geolocalización de un VPS
La localización del servidor no es una cuestión de menor importancia, al contrario. La experiencia de navegación, tan importante para el éxito de cualquier web o sitio, depende en gran medida del punto en el que esté situado el servidor que lo aloja. Y lo es porque cercanía supone dos aspectos fundamentales: por un lado, rapidez, y por otro un mejor posicionamiento SEO.
Por ello es importante buscar un alojamiento que esté próximo al lugar en el que el sitio tenga mayor número de seguidores o la tienda online mayor número de clientes. No es complicado, simplemente hay que hacer una medición de audiencias con cualquiera de las herramientas que existen para ello y buscar un VPS que esté geográficamente bien situado, lo más cerca posible.
La elección no es un problema, ya que existen empresas de alojamiento web en muchos puntos. Es más, incluso se puede optar por otra estrategia: disponer de varios servidores que se comuniquen entre sí. Pero también en este aspecto hay que tener muy en cuenta las distancias entre ellos para que tanto el intercambio de datos como la velocidad de respuesta sean los adecuados.
¿Por qué un VPS?
Los servidores virtuales privados son perfectos para quienes buscan prestaciones, seguridad, confianza y precios ajustados. Son servidores que ofrecen las ventajas de los servidores dedicados, con la única diferencia que se comparte máquina física, aunque cada VPS sea completamente independiente de los demás y tenga espacio propio y diferenciado.
Con un VPS se pueden modificar los recursos disponibles sin alteraciones en el funcionamiento, se pueden controlar las IPs adicionales que se necesiten, se realizan backups avanzados para garantizar todos los datos almacenados y se puede tener a plena disposición servicios como monitorización continua o actualizaciones. En definitiva, máximas prestaciones a precios asequibles.
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